Diciembre 13 de 2023
El sindicato de trabajadores automotrices de EEUU, United Auto Workers (UAW) que representa a más de 400.000 trabajadores en los EE. UU. (y a más de medio millón de trabajadores jubilados), lo que lo convierte en uno de los mas grandes de ese país, el cual hace poco protagonizó una gran huelga, emitió una declaración pidiendo un alto el fuego en la masacre contra Gaza. Esta declaración de respaldo a los palestinos, desde esta poderosa organización obrera, se suma a las multitudinarias movilizaciones de trabajadores, jóvenes y demás sectores, que continúan tomándose las calles en varios países del mundo, con el objetivo de detener la ofensiva bárbara del sionismo y sus aliados de los paises mas poderosos del mundo contra Gaza.
Brandon Mancilla, director de la Región 9A de dicho sindicato, anunció: “La UAW internacional se ha sumado al llamado a un alto el fuego en Israel y Palestina”. En el mismo sentido Shawn Fain, presidente internacional de la agremiación, expresó su “orgullo por la decisión del sindicato», Y no es para menos, ya que como afirmo su presidente, el UAW tiene tradición de colocarse de lado de los oprimidos.
Esta positiva acción solidaria significa una importante decisión política de uno de los sectores más poderosos de la clase obrera de EEUU, y es un paso significativo en la necesidad imperiosa de que la clase obrera a nivel internacional entre solidaria a la resistencia al genocidio israelí y de sus aliados imperialistas, liderados por Joe Biden, presidente de EEUU.
El genocidio al que asistimos deja al desnudo el carácter nazi del sionismo israelí y la descomposición moral de los representantes del sistema capitalista imperialista que lo apoyan y financian. De manera hipócrita, mientras hablan de “democracia” y “defensa de los derechos humanos”, respaldan la masacre de la población palestina inerme, que ha osado rebelarse contra la ocupación colonial y el asesinato histórico del sionismo.
Todo para respaldar a Israel, su «portaviones» en esa región para aplastar la resistencia de los oprimidos y garantizar su dominio de la región.
El momento que atraviesa la humanidad es decisivo. Se trata del enfrentamiento entre la barbarie capitalista imperialista y la lucha de los oprimidos y explotados del mundo. Es por ello que la solidaridad con la causa del pueblo palestino no debe decaer; por el contrario, debe extenderse y profundizarse, exigiendo en las calles y con otras acciones de lucha directa, el fin del genocidio.
Al pronunciamiento de la UAW se suma la coordinación de sectores de trabajadores de Reino Unido, Francia, Dinamarca y Países Bajos, que han realizado bloqueos y protestas en algunas fábricas donde se produce piezas para aviones de combate israelíes. Estas acciones significativas fortalecen las masivas movilizaciones que se han registrado a nivel mundial en solidaridad con el pueblo palestino.
La masividad de las protestas ya está ocasionando contradicciones en el bando que respalda a los agresores sionistas. Las diferencias entre Benjamín Netanyahu (primer ministro israelí) y Joe Biden -en un momento electoral clave en EEUU- así como los señalamientos del sionismo al jefe del gobierno español, acusándolo de ser cómplice de los terroristas, son ejemplos de ello. Estas desavenencias entre los gobiernos de los poderosos podrían ser aprovechadas por el movimiento de masas, si sus dirigentes sindicales y políticos tienen la conducta de profundizar y extender la lucha. La entrada de sectores de la clase obrera industrial, apelando a su mejor tradición de combate, con sus métodos como la huelga, la toma de fábricas, los mítines, etc., inclinaría la balanza en favor de los palestinos, hoy al borde del exterminio.
Un avance significativo sería que los dirigentes de la UAW y demás sectores de la clase obrera tomaran la decisión de frenar la producción en las fábricas, fundamentalmente las de armas y pertrechos para Israel. Esto afectaría directamente el corazón del sistema capitalista imperialista: las ganancias de los empresarios. De esta forma se haría retroceder la masacre, lo cual significaría un impulso a la lucha de los pobres y explotados del mundo.